Física y Química

La física y la química son ciencias que buscan el conocimiento de la naturaleza para describir, explicar y hacer predicciones sobre determinados procesos y fenómenos que se dan en ella. Los grandes logros científicos y tecnológicos alcanzados por ambas disciplinas, así como sus múltiples e importantes aplicaciones sociales, industriales y medioambientales justifican el esfuerzo de la humanidad a lo largo de la historia para comprenderlas y utilizarlas en su beneficio. La materia de Física y Química es fundamental en la modalidad de Ciencias y Tecnología del Bachillerato tanto por su carácter formativo y orientador como por su función preparatoria para estudios posteriores y, en todo caso, porque facilita la integración del alumnado en la sociedad de manera responsable y competente. Esta materia ha de profundizar en la formación científica, iniciada en la etapa anterior, para lograr una mayor familiarización del alumnado con la naturaleza de la actividad científica y tecnológica y la apropiación de las competencias que dicha actividad conlleva. Además, ha de seguir contribuyendo a aumentar el interés de los estudiantes hacia las ciencias, poniendo énfasis en una visión de éstas que permita comprender su dimensión social. La física y la química son ciencias experimentales cuyo fin es elaborar una interpretación de la realidad y no una representación de ésta. Por ello, se debe establecer claramente la diferencia existente entre el papel que desempeñan modelos y teorías, productos del pensamiento humano, y la propia naturaleza física objeto de estudio que es independiente de la actividad científica. La historia de la ciencia constituye un recurso didáctico de gran valor. El estudio de determinados eventos históricos de la física y la química a través de actividades variadas como comentarios de textos, debates, etc., alejadas de la mera anécdota o descripción, promoverá la comprensión de qué es y cómo se construye el conocimiento científico a diferencia del modo de crecimiento de otros tipos de conocimiento. Para ello es importante, teniendo en cuenta las ideas previas, representaciones y creencias del alumnado, plantear interrogantes y dirigir el aprendizaje enfrentándolo con situaciones problemáticas, ayudándolo a adquirir conocimientos científicos que permitan abordarlas y producir así un aprendizaje significativo.